Desde entonces hemos hecho todo lo posible por desarrollar proyectos muy
personales donde interpretar el terruño era nuestra pequeña obsesión.
Trabajamos con vendimia manual nocturna, mesa de selección y encubado por gravedad. Dependiendo de la parcela y de la variedad de uva realizamos diferentes elaboraciones, experimentando continuamente e intentando aprender cada año.
Actualmente, trabajamos con depósitos de acero, tinas, barricas, hormigón y botas aunque las vinificaciones dependen más del origen de las uvas que del material donde se llevan a cabo.